Espidio ha señalado que su llegada representa un “relevo generacional” en Morena, destacando que a sus 27 años asume “una gran responsabilidad” en el Legislativo. Con su toma de protesta, se convertirá en la diputada más joven del Congreso de Puebla.

En este escenario, el nombre de Kevin Marín surge como perfil cercano al armentismo y a la Cuarta Transformación, lo que colocaría su posible nombramiento como una jugada estratégica para reforzar la agenda juvenil del gobierno de Alejandro Armenta. Marín, de 24 años, ha participado en diversas asociaciones civiles, impulsando causas ambientales con jornadas de reforestación, así como campañas de concientización contra la violencia hacia las mujeres. Además, promueve la participación activa de los jóvenes en la política y fue uno de los coordinadores estatales del colectivo Por Amor a Puebla durante la campaña de Armenta en la capital.

El relevo generacional que representaría su llegada lo posicionaría como uno de los jóvenes con mayor compromiso social en el actual escenario político de Puebla. Aunque por ahora no hay confirmación oficial, en el círculo político estatal se espera que la definición ocurra en los próximos días, en un contexto donde la agenda juvenil podría adquirir un nuevo protagonismo dentro del gabinete.